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María Antonia Fariñas nació en La Habana en 1924. Ella fue sin duda una de las figuras más destacadas del teatro para niños y de marionetas en Cuba.
En la década de los años ’50 introdujo en Cuba procedente de Estados Unidos a Peter Pon.
Posteriormente Inicio la programación infantil de marionetas en la incipiente Televisión Cubana con el programa «Jardín de Maravillas», donde se destacaron
también el payaso Chano, Rey y El Patinador.
El grupo de teatro de marionetas del mismo nombre, con Maria Antonia al frente, jugó un importante papel en los públicos de aquellos tiempos, a través de una sostenida y variada programación artística de calidad, que sobresalió por ser entretenida e instructiva.
Junto a su esposo Eurípides Lamata realizó innovaciones a la técnica de las marionetas trayéndolas a la idiosincrasia del público cubano, lo que le facilitó llevar obras de la literatura infantil universal como Cenicienta,
Blancanieves, Pinocho, El Soldadito de Plomo, entre otras, a la técnica del teatro y a los códigos televisivos.
María Antonia Fariñas, dijo adiós a los 75 años de edad en 1999, rodeada del afecto y el cariño de su familia.El legado de su vida y su obra ha perdurado en la memoria de quienes la conocieron o forman parte de ellas. Y la conservación de algunos testimonios documentales, la hacen trascender entre las figuras célebres que enaltecen la historia del teatro para niños y de marionetas en Cuba.
