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Y LOS BAILES DE PERCHERO> Mentiras, Orgías inventadas, bailes inexistentes, mez – Nostalgia Cuba


Y LOS BAILES DE PERCHERO>
Mentiras, Orgías inventadas, bailes inexistentes, mezquinas envidias, que hicieron tanto daño a numerosas estrellas, perjudicando y destruyendo grandes carreras….

Por. Henry Puente.

Los mal llamados bailes de perchero en CUBA, que no eran otra cosa que un sinónimo de orgías, promiscuidad, junto a un comportamiento sexual desenfrenado, fue un hecho mentiroso, injusto impúdico y vergonzoso, algo que sobre todo, a mucha gente le encantaba achacárselos a bellos actores, cantantes y artistas de renombre dentro de la isla, cuando en realidad nunca existieron, fue una nomenclatura inventada por personas despreciables repletas de maledicencia, con extrema mala intención, que conllevó el perjudicar carreras y destruir personas famosas, incluyendo muchas estrellas de la televisión y el teatro cubano.

¿ Porqué ocurrió esté espantoso suceso durante los años 60 ? La respuesta resulta fácil en dilucidar, está falacia la inventaron personas denigrantes y execrables, lo hicieron arrastrados por la envidia, junto a las ansias en ser lo que no podían ser por falta de belleza y talento, algunos tuvieron en su momento poder para vengarse sin razón alguna de gente linda y exitosa, y así lo hicieron.

Sobre todo, esté descomunal atropelló en Cuba prevaleció entre los años 60 y 70 del pasado siglo, época muy difícil y contradictoria en la isla, dónde primó en forma notoria, el prejuicio, la venganza, el placer de perjudicar a los demás, por el simple resentimiento al éxito de los otros, de sentir y ver como triunfaban sin poder soportar la gloria o el reconocimiento ajeno. Incapaces de resistir su propia frustración, se ensañaron con artistas famosos, los cuales eran adorados y perseguidos por la muchedumbre, es ahí con exactitud donde surge el escabroso término, el baile de perchero.

A pesar de los años, al día de hoy aún continúo odiando y aborreciendo, cuando alguien me comenta o simplemente leo, al referirse a un artista famoso, usando la manida, absurda y ridícula frase: «Estuvo preso porque lo cogieron en un baile de perchero», sin saber la estupidez que están expresando, desafortunadamente, todavía lo escuchó y leo de vez en cuando dentro de las redes, porque el chisme junto a la malicia es obvio que serán eternos. Los bailes de perchero en realidad, ni antes ni después, como tal existieron, lo que sucede es, que como todos sabemos, la moral humana es muy cuestionable y sobre todas las cosas la justicia terrestre muy ineficaz.

Atreviéndose a Juzgar impunemente la identidad sexual individual, algo que merece todo el respeto del Mundo por derecho propio, muchos oportunistas tenían deseos de eliminar de la mediatez a otros que brillaban, les resultaba imposible soportar el enorme éxito de ciertos galanes de moda en los años 60, entonces mentes inescrupulosas idearon esté peyorativo argumento para desacreditar, y en algunos casos hasta juzgar judicialmente, en forma en extremo injusta a grandes actores, quiénes también fueron en demasía populares por su belleza y magnífica apariencia, como Enrique Almirante, Julito Martínez, Germán Barrios, Frank Negro, Edwin Fernández etc. Junto a otros menos conocidos, pero que también, de una forma u otra, trabajaban en ese período dentro de la Televisión Cubana.

Los famosos actores antes mencionados, junto algunos no tan famosos, incluso, esté proceder más tarde se extendería a otras disciplinas artísticas, como el teatro y el ballet, sufrieron ser acusados por participar en bailes de percheros, fueron humillados, maltratados, vejados y expulsados sin razón alguna de sus centros de trabajo, cuando la verdadera historia deviene bien diferente.

En el caso de las notorias figuras de la televisión, fui testigo de como eran acosados por docenas de jovencitas, insinuantes, provocativas con actitudes y comportamientos muy lacivos, eso ocurría a diario, a toda hora en las afueras del ICRT, antigua C.MQ, buscando una relación que ellos en todo momento evitaban, no por santos, si no por prudencia, esas aparentemente ingenuas adolecentes, las cuales no tenían de ingenuas ni el uniforme de la escuela que llevaban, los provocaban al punto, de querer que sus autógrafos fueran firmados en sus piernas, entre pechos o cerca de su ropa interior, aunque más tarde esto se vio de otra manera y pasaron a ser ellas las pobres muchachas acosadas.

En el barrio La Víbora, existía una lujosa casa, situada en la calle D’Strampes y Patrocinio, ahora convertida en cabaret nombrada, Brindis-bar, allí vivió un actor llamado Pepé Carreras, quien a pesar de ser un hombre muy apuesto, no tuvo notoriedad en su carrera como actor, el cual trabajo siempre en pequeños papeles dentro de la Televisión cubana, esté tenía la costumbre de hacer reuniones y fiestas, que no pasaban en ser las habituales que todos conocemos y hemos participado, conversar, beber, enamorarse, reír etc. También completamente vestidos, nada del posterior mito que se efectuaban sin ropa, como más tarde llegó a circular y fue dicho de boca en boca solo para desprestigiar y condenar.

Los galanes de moda, junto a muchísimas otras personas, asistían a esas reuniones, como era normal en casa de Pepé, un magnífico anfitrión, también lo hacían cantantes y bailarines, más otros profesionales de distintas esferas, en algún momento en la mencionada casa, se hicieron algunas fotografías varias adolecentes, debido a que, de una forma u otra, a base de su insistencia y persecución, llegaron a tener cierta amistad con sus adorados artistas, junto a esos famosos galanes con poses sugerentes, ellas lo pedían así con su constante provocación, no sucedió nada más, no hubo desnudos, ni pornografía o sexo, como después pasó a ser comentado a voz populi, dentro de la memoria colectiva de toda una nación.

Pues lo contado desencadenó una cacería de brujas espantosa sin precedentes, determinada a destruir carreras, eliminarlos de toda actividad artística y mediatez, algunos fueron a prisión y otros condenados a trabajar en la agricultura por años, teniendo que abandonar cualquier aparición escénica.

Bastante tiempo después, una mujer tan corajuda como la primera actriz Raquel Revuelta, luchó contra viento y marea, imponiéndose en forma radical con el propósito de rescatarlos, consiguiendo al fin integrar de nuevo a unos cuantos a su agrupación «Teatro Estudio» radicada en la sala habanera «Hubert de Blanck» para que pudiesen continuar su labor como actores, más tarde, después de muchos traspiés e incontables vericuetos, algunos volvieron a trabajar dentro de la televisión cubana, otros no les quedó de otra y al salir de prisión optaron por el exilio definitivo.

Está descabellada y horripilante historia, se traspasó a que cuando algún cantante o actor de moda decidía emigrar, inmediatamente, por norma desaparecía su presencia de todos los medios y lugares posibles, creando una vez más el engaño, que lo habían cogido preso por participar en un baile de perchero, de esa forma los ensuciaban, condenaban y menospreciaban por poseer una moral dudosa, ser indecentes y obscenos, siendo una falacia al 100%.

Solo días atrás acabo de leer en las redes, que ciertas cantantes que fueron muy famosas durante los años 60, verdaderos ídolos en Cuba y ahora, desde mucho, viven en Los Estados Unidos, habían estado presas por participar en bailes de perchero, puedo poner mi cabeza en la guillotina aseverando, que es otra de las tantas falsedades que se dijeron, con el único objetivo de menoscabar a grandes artistas, en ocasiones, así de mala puede ser la humanidad. Solo me ilusiona, sin perder la esperanza, que un día no muy lejano pidan perdón ante tanta blasfemia, iniquidad e ilicitud por daños y perjuicios.

Aquí les dejo algo vergonzoso, despreciable y humillante, el espantoso reguetón que hace poco escuché dedicado a los mentirosos e inexistentes bailes de perchero, como prueba de hasta que punto llegó la macabra mentira.

Negros bailando sardana.
Rubias con la capoeira.
Jabás bailando muñeira.
Y tiembla el suelo en La Habana.
Allá una danza lesbiana.
Y acullá un homo-bembé,
Un arabesco. Un sauté.
Un pas à deux africano.
Un pas à trois “meto-mano”,
Un grand jetté. Un ay-fouetté.

Dicen que por los 70
algunos protagonistas
del Perchero eran artistas
famosos. Y en los 80.
¿Música sin vestimenta?
¿Danza de pieles y besos?
¿Solo danza o hubo excesos?
¿Solo erótico areíto?
Pero… ¿bailar es delito?
¿Es verdad que fueron presos?

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